Una de las causas más comunes de la mala función digestiva es: La inflamación del delicado revestimiento delgado del tracto gastrointestinal.
Se activa por cualquier número de causas que pueden incluir la mala alimentación, alergias a los alimentos, el estrés, los medicamentos, los antibióticos, las levaduras y las deficiencias de ácidos grasos. Esta inflamación es la primera etapa en un círculo vicioso de la digestión que pone en marcha una amplia variedad de problemas de salud que van desde sentirse un poco molesto a poner su vida en peligro.
¿Por qué?. . . Porque cuando el revestimiento del intestino se inflama, las células se separan y comienza una "fuga" de sustancias tóxicas en su cuerpo que normalmente generan que éste se bloquee.
Y cuando esto ocurre, el sistema inmunológico y el hígado se ven obligados a trabajar horas extras para luchar contra estas sustancias extrañas. Aquí está una mirada a el ciclo:
Etapa 1 - Inflamación del revestimiento del tracto gastrointestinal
La alteración de la mucosa intestinal se produce por muchas razones. La mala alimentación, alergias a los alimentos, el estrés, los medicamentos, los antibióticos, las levaduras y las deficiencias de ácidos grasos pueden ser todos factores desencadenantes del círculo vicioso que produce la inflamación.
Etapa 2 - Intolerancias alimentarias y de hipersensibilidad
Etapa 2 - Intolerancias alimentarias y de hipersensibilidad
Una vez que el intestino se inflama, el tracto gastrointestinal puede llegar a ser hipersensible a la alimentación e incluso puede comenzar a tener una reacción alérgica a la microflora contenida dentro del propio intestino. Esto puede manifestarse con síntomas que incluyen una mala respuesta digestiva, falta de energía, problemas de la piel como eczemas, reacciones alérgicas y mucho más.
Etapa 3 - Sustancias Tóxicas que abren "fugas" hacia el tracto gastrointestinal
Esta inflamación también se traduce en daños en los desmosomas celulares que se adhieren entre sí para formar la delicada pared de su tracto gastrointestinal. Las moléculas más grandes son capaces de escapar y "fugarse" a través del cuerpo, lo que provoca una respuesta inmune y su cuerpo lucha contra éstas sustancias tóxicas.
Etapa 4 - La mala absorción de nutrientes
Al mismo tiempo su intestino no sólo está filtrando toxinas en su cuerpo debido a este aumento de la permeabilidad y la inflamación, sino que también puede estar absorbiendo menos nutrientes y el procesamiento de los alimentos es deficiente. Esto puede dar lugar a deficiencias de nutrientes y minerales.
Etapa 5 - El hígado se sobrecarga
El hígado actúa como la segunda línea de defensa contra las toxinas no eliminadas por el colon. Cuando el colon no está funcionando adecuadamente para eliminar las toxinas, el hígado tiene que trabajar horas extras, lo que resulta en un estrés hepático. Los síntomas incluyen estreñimiento, distensión abdominal, indigestión, dolores musculares, sequedad en los ojos, fatiga, irritabilidad, cambios de humor y mucho más.
Etapa 6 - El hígado comienza excretar bilis tóxica
Si el hígado se ve obligado a trabajar horas extras para eliminar las toxinas que el colon no está imponiendo, esto puede dar lugar a la excreción hepática de "bilis tóxica", compuesto rico en radicales libres, que luego, a su vez, causa estragos en la capa protectora de la mucosa del tracto intestinal, lo cual comienza nuevamente el ciclo!
¿Cómo se puede apoyar la función digestiva saludable para romper el círculo? Ahora que usted entiende los problemas como el estreñimiento, diarrea, gases, hinchazón, sensación de pesadez, problemas de la piel, etc., se le puede hacer la siguiente pregunta: ¿Qué puedo hacer yo para romper el ciclo de la inflamación, la mala absorción de nutrientes y la digestión ineficiente?
Y la respuesta es (relativamente) simple: Consuma una dieta saludable con alto contenido de fibra, con muchas frutas y verduras frescas. Elimine los alimentos que le provoquen mala digestión. Restablezca el "equilibrio" al complementar su cuerpo con los nutrientes y hierbas probadas para restaurar las enzimas digestivas y probióticos, ésto le ayudará a reducir la inflamación del tracto gastrointestinal y tener bajo control problemas de estreñimiento, diarrea, gases, hinchazón y muchos más.